Una tarde que apuntaba prometedora terminó emborronada, con el pitido final del árbitro confundido entre los silbidos del Bernabéu al Real Madrid. El equipo de Ancelotti había despachado otra media función. Después de un comienzo afilado, se fue dejando llevar, mientras el Rayo Vallecano, tozudo e impulsado por la sabiduría de Iñigo Pérez, se mantenía en pie pese a verse 2-0 y acabó el encuentro empujando al rival contra Lunin. Pareció otra tarde de cálculos, en la que el Madrid estimó que le alcanzaba sin necesidad de comparecer hasta el final, esa divisa del club. Aguantó la victoria, aunque con susto. Y eso que acababa de ver cómo apenas 14 kilómetros al sur de allí, en Getafe, al Atlético se le esfumaban en dos minutos su partido y su ventaja en la Liga.

RMAReal Madrid

2

Andrii Lunin, Raúl Asencio, David Alaba, Lucas Vázquez, Fran García, Jude Bellingham (Brahim Díaz, min. 85), Rodrygo (Federico Valverde, min. 67), Luka Modric, Aurélien Tchouaméni, Vinícius Júnior y Kylian Mbappé (Eduardo Camavinga, min. 78)

RAYRayo

1

Augusto Batalla, Andrei Ratiu, Florian Lejeune, Aridane Hernández, Alfonso Espino (Sergi Guardiola, min. 84), Pedro Díaz (Iván Balliu, min. 69), Pathé Ciss (Unai López, min. 84), Adri Embarba (Óscar Valentín, min. 69), Pep Chavarría, Gerard Gumbau (Óscar Trejo, min. 69) y Álvaro García

Goles 1-0 min. 29: Kylian Mbappe. 2-0 min. 33: Vinicius Junior. 2-1 min. 46: Pedro Díaz

Arbitro Francisco José Hernández Maeso

Tarjetas amarillas Gumbau (min. 62), Vinicius Junior (min. 78), Aurelien Tchouameni (min. 84), Modric (min. 91)

El Real jugaba también con la vista girada hacia el Metropolitano, adonde tiene que ir el miércoles por la vuelta de los octavos de la Champions, pero se le acababa de abrir la ocasión de adelantarlos en la tabla. Además, el aplazamiento del encuentro del Barça por el fallecimiento del médico Carles Miñarro les permitía meter a los azulgrana esa pequeña presión de igualarles a puntos. La doble invitación les disparó al comienzo. Mbappé parecía revivido tras el bajón de la muela, y Vinicius también levantó el vuelo respecto de la ida contra el Atlético, con apetito para el robo y para ir a buscar a Ratiu, tal vez el mejor futbolista del Rayo. El brasileño abrió su tarde con un robo y una llegada a la línea de fondo de la que sacó un pase atrás que no encontró a nadie. También muy pronto volvió a mezclar con Mbappé, que le dejó el balón para otro centro al punto de penalti, donde Rodrygo no afinó el cabezazo.

Entre el regreso de Bellingham y la presencia de Modric, el Madrid avanzaba con más estructura, con más ideas y variedad de registros. El equipo se ordena alrededor del inglés, que todo lo equilibra, y Modric añade el picante de cambiar el paso, ya fuera la velocidad o la zona del campo que castigar. El croata vive además más holgado con la compañía de Tchouameni, de nuevo muy sólido en el corte, y muy limpio en el pase. El francés lleva semanas instalado en un escalón muy por encima de ese comienzo de curso en el que su aparente indolencia disparó los silbidos del Bernabéu. Ha sintonizado ya la frecuencia más alta del Madrid, también hacia delante.

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El Rayo, pese a presentarse muy mermado por su abultada colección de bajas importantes, no renunció al manual eléctrico de Iñigo Pérez: energía para buscar el robo y ningún rodeo para lanzarse a la portería contraria, esta vez guardada por Lunin, que dio descanso a Courtois. Vinicius se durmió un parpadeo al bajar a recibir, Ratiu recuperó y probó de lejos a Lunin. El ucranio despejó y Gumbau tuvo una segunda oportunidad.

Pero el desequilibrio determinante lo aportó la pareja de baile del lateral rumano del Rayo, que tiene varias veladas intensas en su álbum. Vinicius, que ya había tirado al palo, puso a correr a Mbappé con el exterior. El francés recortó a Lejeune en el área y acertó con la red.

Había dejado atrás su pequeño bache impulsado por el brasileño, que agitaba pleno de revoluciones. Tras lanzar al francés, Vinicius sacó premio de su tarde desencadenada. Volvió a zafarse en el área de Ratiu, tan frustrante en otras citas, pero se encontró a Lejeune y retrocedió hacia la banda. Sin embargo, no había acabado. Ahí volvió a virar para pisar de nuevo el área, donde se reencontró con Ratiu. Le despistó con un par de bicicletas y marcó.

Pero ni así se descompuso el Rayo, siempre intenso, siempre mirando hacia delante aunque se viera empujado hacia atrás. Aprovechó el último resquicio del primer tiempo para recortar distancia y avisar al Madrid de que la tarde no estaba cerrada. Se movió rápido en la frontal y Pedro Díaz enganchó un disparo que botó dentro tras dar en el larguero.

El Madrid fue cediendo tiempo con la pelota, tal vez confiado en que retroceder le abría espacio para correr y terminar de cerrar la jornada. Y corrió. Pero ni Mbappé ni Vinicius atinaban con la portería, mientras el Rayo echaba carbón a la caldera, con Trejo, Óscar Valentín, Sergi Guardiola y Unai López. Ancelotti maniobró con Valverde, Camavinga y Brahim, pero había pasado el momento y el Rayo apretaba. El Madrid aguantó, al contrario que el Atlético, y enfila la cruda cita del miércoles en el Metropolitano con el recuerdo de lo que puede hacer hasta que se permite desconectarse. Y también, pese al borrón final, algo más reenganchado a la Liga.

Clasificación Clasificación PT PJ PG PE PP 1

57 26 18 3 5 2 RMA

57 27 17 6 4 3

56 27 16 8 3 4 ATH

49 27 13 10 4 5 VLL

44 26 12 8 6

Clasificación PT PJ PG PE PP 6 BET

39 27 10 9 8 7

37 27 10 7 10 8 RAY

36 27 9 9 9 9

36 27 10 6 11 10 RSO

34 26 10 4 12